Colombia referente mundial
Manila. (feb. 24/22). El Consuado de Colombia en Manila, Informa:
El Presidente Iván Duque, el pasado 15 de febrero hizo un llamado a agilizar los desembolsos de recursos para poder atender la crisis migratoria y pidió defender la democracia latinoamericana de las amenazas de la injerencia extranjera
• En su intervención ante el plenario del Parlamento Europeo en Estrasburgo, Francia, el Presidente de Colombia fue ovacionado cuando dijo que Colombia ha acogido fraternalmente a 1.8 millones de migrantes venezolanos, aún en medio de las dificultades por la pandemia.
• El Mandatario reconoció el apoyo de la Unión Europea en las mesas de donantes, pero advirtió que “la velocidad entre los compromisos y los desembolsos muestra un grande abismo”, y subrayó que “es necesario acelerar los desembolsos de las mesas de donantes para acompañar los esfuerzos de todas las naciones”.
• “No son recursos que pedimos para nosotros, sino recursos que se piden para los migrantes, y la velocidad de los desembolsos significa también la confianza permanente en la cooperación dinámica que se requiere”, agregó.
• Señaló que “así como hablamos de ese gesto humanitario, también es necesario que el mundo siga actuando para que cese la causa de esta tragedia. Y la causa de esa tragedia es la dictadura oprobiosa de Nicolás Maduro, que día a día va generando más diáspora más flagelo y más deterioro del tejido social en Venezuela”.
• El Mandatario expresó que “aunque no somos un país rico, hemos sabido atender al migrante, sin dejarnos llevar por la xenofobia o por la indiferencia. Hemos acogido a 1.8 millones de migrantes y les estamos entregando a los hermanos venezolanos esas tarjetas que los acreditan con el Estatuto”.
• Duque manifestó que los venezolanos que han llegado a Colombia reciben esta atención en una campaña que llamada ‘Visibles’, que puedan ser personas, que puedan tener una vida profesional, sistema de salud, una vivienda, que puedan sentirse cobijados y protegidos.
• Así mismo, pidió “proteger nuestra democracia de la influencia o de la injerencia extranjera, de los que pretenden manipular algoritmos o de los que pretenden también generar odio y fractura” y consideró que “estar unidos en advertir estas circunstancias es nuestro deber ético”.